Creí que estaba sediento de la muerte, pero luego me di cuenta que estaba equivocado, que dentro de mi ya ella mataba la suciedad de los malos recuerdos, malos momentos, y pensamientos.
Ella esta sedienta de mi, pero quizás no lo suficiente.
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
0 comentarios:
Publicar un comentario